El ex Sacerdote y la mujer (de chaleco negro) por la que dejo el ministerio |
No es el primero, ni tampoco será el último
que deje el ministerio. Su decisión causo más que asombro, polémica y desilusión entre algunos candidatos al
Sacerdocio a quienes dirigía. Y molestia e incomprensión por la mayoría de sus
colegas sacerdotes.
Originario de Guadalajara, de la Colonia
Jardines de la Cruz. Se llama Herminio Eugenio de Jesús Orea Peredo, tiene 34
años, ingreso a la preparatoria del Seminario en 1994. Durante su formación en
el Seminario gozo de la estima de los formadores, elitista y de apariencia
intelectual; logró ganarse la confianza de los formadores, quienes lo
promovieron como responsable de los Seminaristas en el Seminario Auxiliar
de la Barca, era el prototipo de Seminarista que los formadores de ese tiempo
querían, de apariencia ordenada, de ortodoxia probada, con eso fue ordenado en
el 2006.
Después de su ordenación fue enviado a estudiar a Roma, Liturgia, como
todos los que van a estudiar a Roma estudian y se pasean gracias a la Iglesia,
para después regresar como formadores en su respectivo Seminario. A su
regreso fue enviado a la Parroquia de
San Pedro Apóstol, fue ahí donde por la falta de oración, el mundo se lo comió, ahí trabajo con grupos entre ellos con los jóvenes, el llamado "Misionero", donde conoció a Inés Durán, quien también servía en otras cuestiones de la misma parroquia.
El idilio se prolongo en secreto, después de San Pedro Apóstol fue enviado al Seminario auxiliar de Ahualulco el 1 de septiembre de 2010, como Prefecto de la Secundaria del Seminario de Guadalajara, y el romance se prolongo, hasta que la susodicha quedo embarazada. En agosto de 2013 decidió formalmente dejar el ministerio, aludiendo que no quería vivir como muchos colegas suyos con una doble vida, misma que vivió unos meses o quizá unos años antes de tomar esta decisión.
La hija del ex Sacerdote |
Es lamentable que después de haber tenido un periodo de reflexión durante toda la formación en el Seminario, y siendo formador del Seminario, donde se dice (y se supone) que están los mejores Sacerdotes formando futuros Sacerdotes, haya dejado el ministerio.
Podrá excusarse y afirmar (como la mayoría lo hace cuando deja el ministerio) de que lo hizo con convicción para evitar vivir una doble vida, pero, no es honesto que un Sacerdote deje el ministerio, al menos en la Iglesia católica, porque aunque para muchos sea un héroe fue un hombre que no cumplió con su palabra, que no fue fiel y que le quedo mal a Dios, ¿podrá acaso ser fiel a un humano?.
Este tipo de casos sirven para que la Iglesia se ponga a pensar, no para replantearse si es bueno o no el Celibato, es mas que bueno, y seria el debacle institucional si lo cambia o lo hace opcional, es una llamada de atención a todos los Seminaristas comodinos, que viven de la Iglesia, que nacen pobres como laicos y que como curas viven como ricos.