Desde que se supo que había interés por parte del Cardenal Sandoval de promover la zona de Ocotlán como una nueva diócesis, y una vez habiendo enviado a la Nunciatura Apostólica los papeles necesarios empezó el hervidero de intereses de algunos ilustres y otros no tan ilustres miembros del presbiterio de Guadalajara, por hacer méritos y acercarse cada vez más en ser candidatos a la terna episcopal.
Primero el anciano Obispo auxiliar emérito Rafael Martínez Sainz, quien fue párroco por mucho tiempo en Ocotlán. Su influencia en la zona fue decisiva (ya siendo Obispo) para que los papeles enviados a Roma se apresurarán, sus intenciones eran claras, quería ser el primer Obispo de Ocotlán pero no fue así. Debido a su avanzada edad al haber sido elegido Obispo auxiliar, el cual se vio más como pago por favores recibidos al mismo Sandoval que por méritos propios. Para eso preparo a un pequeño grupo de Sacerdotes, a quienes conoció desde que eran Seminaristas. A este grupo se le conoce como “Grupo Ocotlán” quien ya se ha posicionado de la zona, como preámbulo de una erección canónica como Diócesis.
EL GRUPO OCOTLÁN
Algunos de los que integran este grupo y los más emblemáticos son Rafael Galán (ordenado en 1993) a quien su diabetes le ha mermado su salud en los últimos años, actual vicario de Dulce nombre de Jesús desde julio de 2013, Eduardo Salcedo Becerra (ordenado en 1992), mejor conocido como la Vaca y quien se sabe que ha acosado a varios adolescentes y jóvenes y quien desde hace tiempo se ha apoderado del arte sacro diocesano, actualmente en la parroquia de Zapopan Estadio desde 2010, otro es Jorge Antonio Luna Casillas (ordenado en 1992) actual párroco de Dulce nombre de Jesús, también del mismo grupo: Jesús García Hernández (ordenado en 1992) actual párroco de San Isidro Oriente desde 2013, Rene González Ramírez (ordenado en 1993) actual párroco del Señor de la Divina Misericordia en La Barca desde el 2003.
Todos ellos encabezados por Monseñor Martínez Sainz quien logró posicionar a su gallo como Párroco de la iglesia principal el Sacerdote Antonio Olivos Sepúlveda (de 69 años), quien anteriormente estuvo como Párroco en Corpus Christi y fue el asesor del turbio movimiento de la Renovación Carismática diocesana.
OTRO INTERESADO EXPERTO EN EL ARTE DE LA DIVISIÓN
Se llama Miguel Ángel González Rodríguez quien nació en 1960 en Nochistlán, Zacatecas y fue ordenado en 1987 (ver video). Y quien por mucho tiempo (desde 1998 al 2012) (ver video) llego a estar en la parroquia de Ocotlán al grado que sintiéndose de las confianzas del entonces Cardenal Sandoval llego a pensar que era el legítimo primer Obispo de la futura diócesis.
El Sacerdote Miguel Ángel es un experto en el arte de la persuasión, el tiempo fue su mayor aliado, logro comprarse a los principales de la ciudad, familias de abolengo, empresarios y políticos de la zona. Según el para poder posicionar su influencia y poder, para lograr ser un candidato legitimo a Obispo, pero ¡oh sorpresa! No contaba con que lo cambiarían, aunque ciertamente le toco una buena plaza como actual párroco de Cristo Rey sigue influyendo en muchas de las personas de la ciudad.
Siendo Párroco de Ocotlán logró ganarse a la gente pero no a todo el presbiterio de la zona. Quienes en su tiempo estaban molestos por la actitud soberbia, venenosa y divisoria del Cura González Rodríguez. Pero él tiene muy presente un dicho que lo ha hecho propio y que lo ha sabido exprimir al 100%: el dicho versa así: “con dinero baila el perro” y el lo ha comprobado, no solo baila el perro, sino también los Obispos, los Curas y porque no un Cardenal, eh ahí porque Don Juan Sandoval visitaba constantemente (más de 3 veces por año) al Sacerdote Miguel Ángel, y es de suponer el estar en una parroquia que económicamente aportaba mucho a las arcas del Cura y de la Arquidiócesis, con ese dinero que no podía hacer el Cura y el que ahora está ahí, sobre todo con los dadivosos regalos a los nuevos Curas que llegaban al decanato, logró imponer su liderazgo, por cierto negativo.
LOS QUE SIEMPRE PIERDEN….LOS FELIGRESES
La feligresía de Ocotlán esta confundida y enojada. Se les hizo saber que el bueno, el santo, el mártir era el ex párroco, Miguel Ángel (usted amable lector se dará cuenta quien les enveneno el corazón). Y que había sido despedido de la parroquia injustamente, “después de tanto tiempo de haber gastado su vida” en bien de los fieles…¿será?.
El caso es que los fieles (supuestamente motivados por iniciativa propia) han manifestado su desacuerdo en el nombramiento del nuevo párroco, el Cura Olivos (pupilo del Obispo emérito) y quienes iniciaron una campaña de desprestigio para evitar que este tomara posesión. Se plantaron en el Arzobispado, juntaron firmas, y últimamente han sacado periodicazos en los diarios locales de la ciudad de Ocotlán, aludiendo que los nuevos Sacerdotes son de mal ejemplo, y su anterior párroco, era el bueno, según ellos
El caso es que los fieles no se mueven solos, y el mismo ex Párroco ha sabido mover los hilos aun desde su nueva paroquia, lo que ha ocasionado que el mismo Cardenal Robles no le tome en cuenta, o sea que su ambicioso sueño de ser Obispo se ha esfumado, y como en todos los asuntos que suceden quien pierde es el pueblo católico.