O una de dos o la gente no quiere obedecer sobre todo a los cambios de sus Sacerdotes o los Sacerdotes están dando de que hablar con su comportamiento nada evangélico y la gente ya esta cansada de esto.
Ahora toca su turno a otra Parroquia, la del Divino Salvador donde la gente esta inconforme con su Párroco, quien apenas tiene dos meses y algunos días de estar al frente de esta comunidad. Se llama Julio Sanchez Gazca y fue asignado a esa comunidad desde el 17 de julio, tiene 20 años de ordenado y fue formador del Seminario.
La comunidad se ha unido y ya van tres veces que visitan el Arzobispado. Y no han recibido respuesta. De hecho el Secretario Canciller, como siempre ha abordado al grupo inconforme y les ha negado la entrevista con el Cardenal.
La gente no quiere hacer el problema mas grande y pide hablar con su Pastor, un derecho que a todo católico le compete, ellos afirman:
“Hemos visto desmotivación, hemos visto desunión, hemos visto fracciones y lo que queremos justamente es presentar los detalles solamente a nuestro pastor, no los queremos dar a conocer solamente a nuestro pastor pero que queremos que el cardenal nos escuche”.
Los fieles esperan que el Cardenal Robles los reciba antes de que salga a Roma al Sinodo de los Obispos, mientras tanto las tensiones en esa Parroquia siguen en aumento.
Según los conocimientos, competencia y posición de que gozan, los fieles tienen el derecho e incluso a veces el deber de manifestar a los Pastores su opinión sobre cuestiones que pertenecen al bien de la Iglesia, y también tienen derecho a hacer conocer su opinión a los demás fieles cristianos , con el debido respeto a la integridad de la fe y la moral y a la reverencia hacia sus pastores, y con la consideración por el bien común y la dignidad de las personas. [CIC, Codex Iuris Canonicus (1983), Can. 212, § 3.]